Caminando cierta mañana de invierno; justo antes del medio día,
me encontré con una extraña mariposa de un azul turquesa muy intenso que se alimentaba
de un pequeño pájaro muerto.
¿Por qué un ser vivo tan hermoso se rebaja a la vil carroña
de la muerte? <<Me pregunté>>
Tomé las fotografías que ahora ves y seguí transitando el
solitario sendero que conduce a las Encinillas.
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